lunes, marzo 17, 2014

Viajar en Tren



Quién haya sido testigo de este viaje,
dirá que ha sido tranquilo, pausado y como un golpe seco.
Ambicioso y apasionado, una inversión o un mito; un espejismo.

Nuestros dedos son versos que no se tocan, sonidos silenciosos
caricias testarudas que chocan sin encontrarse,
pedazos de amor enraizado, mímica en manos que se piden distancia.

Delatarme fue esa voz que escapo de mi,
ese sentimiento de alas largas,
ese temor a caer y al no recuerdo;
fue el suspiro dentro del puño apretado.

Este amanecer nos ilumino tan tarde tan lejos tan noche y tan a hurtadillas,
dancemos juntos como gaviotas, porque todo lo que pretendí ser se perdió a tus ojos.
A pies descalzos sin camino de vuelta  
aferrándome a este amor en contra de todas las voluntades.

Déjame amarte con esa honestidad de cuerpo desnudo de carne,
con esa sinceridad de flama encendida dentro de este vientre de oscuridad,
en esta complicidad de soledad sin rumbo ni hora fija.

Nos perdimos en aquel tren y una parte de nosotros aun viaja entre aquellos rieles,
fuimos un par de niños, tal vez un poco menos ancianos, o aquel borrón sobre un muro.
Sabías que nos mirábamos aun con los ojos cerrados?

Descubrí todos los lenguajes a través de tus gestos,
todo era luminoso, apenas distinguía tus labios de entre esas llagas de sol.
tu cuerpo cerca del mío un para siempre ruidoso y sereno,
entre el caos, entre el mundo y la gente reproduciendo el sonido que no se escucha,
gimiendo y gritando, corriendo en círculos, yendo viniendo por el mismo camino,
laberinto sin ruta, sitio al que no se vuelve.

Pensar que sin haber hecho daño, que sin haber salido heridos
estamos aquí uno en el otro contenidos en este silencio.

Elva*

viernes, diciembre 03, 2010

Noviembre y Café

centro

Amor, como luciérnaga vestías azul y viento,
tu sonrisa era el augurio de noche estrellada.
Registrabas mis sueños y organizabas mis noches.

Tus labios eran estrellas y tu boca pintaba la mía,
Estábamos lejos y nuestros labios abrieron sus alas
Me estrelle contra ti y los besos cayeron como la lluvia.

Temo de ti como temo a la muerte,
mi amor es herida, es un rasguño profundo.
será la fe, o el sentir de tu pulso recostado en el mío.

Mi cuerpo gritaba tu nombre,
las voces y las gentes son tu sombra.
Tus manos, un dedo tras otro mi caricia.
Tu cabello es un listón negro bailando al viento.

Tu sonrisa es el menguar de una noche,
o la oscuridad de tus ojos la luz.
Mis dedos se desmoronaban al movimiento de los tuyos,
mis piernas caían pesadas, no hay pasos que alcanzar.

Era la soledad y el café,
esperábamos a que las gotas florecieran en aquellas tazas,
pero no brotaron ni flores, ni manteles, ni sillas.

Tú y yo canela y azúcar,
este espacio es gigante,
¿Mi voz era tuya?
Tu boca daba sorbos a cada silencio.

Silencio en el que deje caer mi alma.
Silencio embravecido, Amor…

Elva*

martes, marzo 30, 2010

Morir a gotas...

Angel02 - Lagrimas de Piedra...

Cinco gigantes rodean mi cama,
Esta neblina me cubre los ojos,
Nadie atraviesa mi puerta,

Soy un viento sin aire,
Un cascaron seco,
Estoy aquí atrapada,
Vacía, desollando silencios.
escuchando voces escurrir en mi oído.

Se que hoy es mi funeral,
Pero nadie acude a esta sala de asientos vacios,
Será que ni yo asistiré a mi muerte.
No llueve, esta lluvia de sombras no moja,
Siento mi carne que arde y mi alma que escapa.


Elva*

sábado, febrero 06, 2010

El Rumbo Fijo...

vertigo a bajar...

Me gustan las calles sucias,
Porque puedo mirar en ellas el recuerdo de lo pasado
las huellas que dejaron atrás su sombra,
puedo sentir en ellas a los que no vi,
a los que no conoceré nunca.
Sé que gracias a estas calles sucias
viviré de lo que me perdí,
Y tendré en cuenta aquello que jamás sabré si sucedió.

Me gustan las ventanas rotas,
porque a través de esos cristales estrellados,
puedo sentir el golpe de la ausencia,
de lo frágil, de lo frio, de lo roto.
de aquello que una vez completo,
dejó de estarlo para siempre.

Me gustan las puertas cerradas,
Porque así no imagino lo que hay dentro,
ni tengo que allanar soledades sin invitación,
Me gustan cerradas porque así no he de cruzarlas.

Elva*

martes, enero 12, 2010

Noche sin lluvia.

detras de la luz

El espacio vacío me llena de el,

empapa estos muros de silencios,

de voces, de historias y de rostros que escurren,

todo llueve en esta pared,

como recordatorio de mi silencio ahogado.


La soledad es una muralla

un túnel por el que cruzo,

estoy en esta espiral que se cierra,

dando vueltas en este torbellino.

Siento que todo pasa,

giro en el mismo sitio,

Con la misma fuerza que ayer,

con la misma locura envolvente,

oscurece y todo lo que brota en mi alma se seca.


Las ideas fueron pájaros colgados en mi ventana,

diminutas estrellas que se arrojaron del cielo.

Me envuelvo en esta neblina y me hecho a volar.

Me gusta creer en las cometas y en ese vaivén de llevar al viento en la mano.


Estas noches se vuelven más largas o más noches,

Estoy sin tangos, sin saltamontes y sin la posibilidad de encontrar un camino,

estoy esperando por un par de alas para volar.


Espero en este jardín y tiro mis sueños,

Ojala florezcan rayos y estrellas,

Y del cielo caigan las hojas que nos arrojo el sol.

Todo en mí está seco,

mis pies se desmoronan en cada huella,

mi boca vacía marchita,

mis besos no son el rocío que moja.


Cuántos filos cortaron mis venas,

y en cada hilo degollaba a la suerte,

de sentir, de ser, de existir.

He de seguir soñando o morir,

esta oscuridad es mi sabana,

o la luz de mis velas.


Será que mi alma siempre fue tan oscura,

o transparente la noche que la alumbraba.


Elva*

miércoles, enero 06, 2010

De funebres inviernos.

fire

No tengas piedad de mí,
Mi sangre me la he bebido trago a trago
Y en cada bocado he devorado mi carne.

Nunca deje que el camino infinito se acortada,
Y siempre me he preguntado
En dónde estuve la mayor parte de mi existencia.

He de guardar silencio una vez más
dejar que esas llamas que arden en mi pecho se extingan
Hoy sé que la felicidad es una caja de dulces que jamás probé.

Intente morir tantas veces,
tantas más que las que me decidí a vivir,
Escape tantas veces,
más de las que logre encontrarme.


Elva*

lunes, diciembre 28, 2009

Acto Primero...

entierros


El último suspiro estalla en mi cuerpo,

estoy sin fortuna y sin herederos a caja de sueños y coronas de espinas,

no tengo hermanos, ni verdugos, ni velas que den por mí una plegaria...


Sin muertos que recordar los fantasmas son reflejos aferrándose a la mirada,

siento un terremoto en los dedos derribando a las atalayas de mi niñez

sosteniendo en una ostia a este mundo de azúcar ácida...


Si pudiera recortar las huellas de mi pies y multiplicar mis pasos,

Si pudiera roer mi lengua y tragar todas mis blasfemias,

Si pudiera con los excesos y mis vicios derribarían ángeles sobre mi tumba.


Grito y la vida se resbala por mi garganta,

abro el telón de mi vida en esta obra celestial del infierno,

el viento recorre como cuervo las butacas,

las ventanas chorrean luz en esta oscuridad que empapa

sostengo el silencio, cruzo los dedos e interpreto mi muerte...


Elva*



miércoles, octubre 14, 2009

De inviernos funebres...

atardecer

Si hablo de amor,
talare soledades en tu dolor callado;
y enramada de uno a otro trepare a tus ramas,
hablare de ti sin nombrarte
y beberé de ti hasta preñar mi lengua…

De tu alma fui titiritero,
recorté otros rostros para hilvanar tu cara
junté pedazos de mi carne hasta formarte,
te di un ojo de gato para mirar las noches,
te vestí de papel y letras para hacerte parte de mis cuentos
te di cualidad de amante …

Tus labios eran gruesos,
tus mordidas las oscuras profanando mi cuello,
tus dedos saltamontes en el espesor de mi piel;
tu silencio dibujaba claroscuros,
te amarrabas de mi cabello y te escondías entre mis piernas…

Perennemente fui tuya,
tuya y sin ser más que de ti.

Hoy me permito construir tu recuerdo,
alquimizar este sentimiento fermentado,
inventar otras enfermedades,
me ahogaré en tu fuego y lloveré de tus labios…

Serás tormenta al hablar,
y en tus defectos enramados plantaré en mi cama;
serás mi vicio, el tabaco y la comida,
y la nieve en el invierno que enterrara nuestros nombres…



Elva*

miércoles, septiembre 23, 2009

De Septiembres...

si es que amanece

Siento que septiembre me acaricia,
mi carne es de hojas secas.
Hay un cosquilleo que sube,
con el viento que danza,
y el dolor es como hormigas,
éste silencio es de los grillos.

Extraño el abrazo de la oscuridad,
estos labios de sombras,
y la tierra pegada a mis plantas

Estoy sola, del cielo caen espejos y cristales
caen brillos y lucieras de diamantina.

Soy amarga, salada,
llueve y septiembre emana hojas,
las paredes se caen a pedazos,
aquí la lluvia no se bebe
necesito este silencio de ausencias.


Elva*

jueves, septiembre 17, 2009

La que viene del mar...

Lluvia de estrellas

Adriana escucha el silencio que pintan mis dedos,
Escucha el silencio que escurre en mi boca,
Y dibuja cada una de las palabras de mi silencio callado.

Adriana envuelta de olas es un murmullo del agua salada,
Es luz y sombra que desaparece al girar el sol en el día,
Es oscuridad y luz que brilla mientras la noche me abraza.

Adriana y yo somos dos notas que no emanan de ninguna boca,
Somos ese canto ensordecedor que nadie escucha,
Y la conversación que jamás contare.

Elva*