martes, diciembre 26, 2006

A veces quisiera morir...

música
foto:Elva García

... pero a veces es más grande mi necesidad de volver a nacer

Muchos saludos a todos y espero que esten pasando unas muy felices fiestas,


Espero que el tiempo aunque rápido y certero esta vez nos de el espacio necesario para continuar a su paso y que las ganas de seguir y salir adelante sean cada vez mayores y más frutiferas para todos.

Elva*

martes, noviembre 28, 2006

Compás de tiempo

Sola
(foto:Elva García)
Salgo a la calle,
Se derrite el asfalto,
No soy yo quien camina,
sigo a mi sombra,
y mi sombra no camina sin ti.
Estoy perdida,
En una tormenta
Soy lluvia de mis ojos,
Que no termina más de llover,
Hasta que tú vuelvas,
No volverás,
Me ahogo en mi misma
Me hundo en mí,
Soy agua soy nada,
Apenas una molécula
Un átomo que no se crea ni se destruye,
Aunque así se sienta.

Este vació tan lleno de nada
me crea distancias,
espacios de tiempo,
y soy soledades,
rincones oscuros,
que lastiman de un solo lado (el izquierdo)
Aquí estoy yo,
En el mismo centro,
En el mismo caos y sin el mismo rumbo,
Girando como lo hace el viento,
Soy aire,
soy tú,
tú,
y cuando estoy sola…
ME sabe en los labios tu ausencia.


Elva*

miércoles, octubre 11, 2006

El ataúd de la sonrisa...

Morir
Te fuiste y yo no pude recoger el último suspiro de tu boca.
Te fuiste y fue todo diferente,
aunque aquí están tus zapatos tus ropas y tus sueños,
Te fuiste de entre mis manos con un viento que no regresa
y yo no lloro tu descanso, ni tu sufrimiento, ni lo que no te di,
Lloro las noches, los meses y los años que no vuelven…

Recuerdo lo que fue ayer:
Ellos te llevaron en esa caja,
Envuelto en esas bolsas,
Como si la carne fuera solo eso,
Un pedazo de carne.
Te llevaron lejos de mí,
con el pretexto de preparar tu cuerpo,
como si la vida no fuera bastante para lograrlo.
Luego te sacaron de entre las gentes
De estos y aquellos que nunca conocí.
Pero todos lloraban al mismo son,
Y las llamas seguían brillando
y de nuestros ojos escurría la cera.

Selle en mis ojos ese último recuerdo,
Selle en un beso tu cristal y tu rostro,
Mi última lágrima se derritió sobre el ataúd,
y yo tuve que beber mi llanto,
mi corazón muere contigo si es que algún vuelvo amar.
Guarde mi alma en tu pecho para ir contigo,
Mis oídos rezaban y mi nariz se formo de flores
porque mi hablar a solas es sólo para ti.

Recuerdas a los locos,
la chica de cartón piedra que cantamos,
Por qué no despertar papá,
Es tan fácil,
sólo abre tus ojos,
Y poco a poco la luz entrara de nuevo en ti.

Pero no es inútil soñar,
Tus ojos fríos estaban soldados con maquillaje,
Y yo, yo que siempre me sentí tan torpe,
No pude sacarte de ahí,
llevarte entre mis brazos como cuando tú lo hacías conmigo,
cuanto querías tu casa, tus sueños y los adobes viejos que resguardaron tu dolor.
esa casa de mi bisabuela que será la tumba de nuestras sonrisas ahora que te has ido.

No, ya no vuelves,
tú estabas lejos,
lejos de ahí y de tu cuerpo,
de tus cosas y de las mías,
de todo lo nuestro.
Sola, sola, sola,
así se escribirá mi nombre,
Hoy que queda,
No queda ni tiempo ni vida,
Y tú me decías que eso es lo que me sobra.

Hoy no tengo a que regresar,
Con quien compartir los sábados y los domingos,
Con quién discutir de lo que todos no hablan,
Quien me entienda, a quien entender.
Porque sólo tú y yo nos entendimos.

Tengo miedo,
miedo de morir y no estar contigo,
morir y que tu no estés a mi lado,
De que mi bondad no te alcance los talones,
De que yo siendo tan miserable sea ni un suspiro de ti.

Hoy andarás también luchando contra tus molinos de viento,
Construyendo castillos en el aire,
Cantando sones de viento y minuetos de aire.
Pescando ángeles y enojadote por el trafico de los pájaros,
Papá si vieras cuanto extrañare llamarte por ese nombre,
De que tamaño serán tus alas,
que pequeño se siente mi corazón.

Prometo no volver a molestarme por tus cigarros,
Perdóname por esconderlos,
Perdóname por no querer que fumaras,
Perdón por lo que hoy ser que harás a tus anchas,
Porque hoy se que las nubes se construirán con tu aliento.


Elva*

miércoles, septiembre 20, 2006

Sólo a ti...

cruz
(foto: Elva García) La ultima junto a el

Quisiera alcanzar con mis dedos tu grandeza,
saber que mañana estarás estaras aquí,
que soñar es sólo un sueño y tu sigues a mi lado,
que estas de viaje por el cielo con Quijote.
Hoy tu nombre lleno mis huecos,
y tu ausencia invadio la casa, tu cama y tu jardín,
aquí me quedo yo sola,
con tu guayabo, tu durazno y mi corazón,
con tu colección de monedas que eran tus estrellas,
y la cocina vacia.

Tal vez hoy las palabras no tengan letras,
ni rimas, ni frases que hagan que alguien sea yo cuando las lea,
hoy no se si el dolor tiene nombre,
pero si tuviera uno le pondría como yo.

El lunes fallecio mi padre y yo mori junto con él.

Ayer en punto de las 4 toco la tierra y se volvio angel.
será que por eso que las nubes estaban tan abajo.

Tal vez ya no escriba, tal vez lo siga haciendo,pero por hoy este hueco la poesía no lo llena, dudo que exista una metafora que cubra las ausencias.

Elva*

sábado, agosto 26, 2006

Ausencias.

100_0279
(foto: Elva García)
A qué te sabrá mi ausencia,
cómo catarás las horas sin una gota de mí,
con qué acompañaras el pan de tu noche sin el sazón de mi boca,
cómo endulzarás la cama sin el sudor de mi cuerpo,
cómo alumbras la noche sin mi alma en tus pupilas.

Ya nada de lo que te suceda me importa.
No volveré a salvarte en mi recuerdo,
No volveré como aliento a tu boca en el último respiro,
No volveré a ser el cuerpo del papel arroz en tus manos,
No volveré a ser de tus labios, ni el sueño que te regrese tus alas,
No volveré a ser la droga que le regresara la vida a tu muerte.

Hoy me decidí olvidarte,
Hoy me decidí no volver a escribir de ti.
Hoy decidí enamorarme del silencio.
de la soledad que guardé en mi alcoba.
del fuego que calentó mi cuerpo mientras tú no estabas,
de la locura que justifico tu ausencia.
Me enamorare de todo y de nada,
lejos de ti y de tu recuerdo,
pensando en mi ausencia a qué te sabrá.


Elva*

jueves, agosto 03, 2006

Es lo que hay...


Tu nombre lo sisea mi tímpano,
y las vocales son olas que vienen y van,
revolcándote sobre agua,
navegando en mi mente,
estrellándote en mi,
figurando tu voz y dibujando oídos.

Déjame sucumbir bajo tu sombra,
escarbar locuras y almacenar muertes
quédate a mi lado desollando penas,
enturbiémonos el reflejo en vino…

Jamás tejí sudarios con tu amor, ni fui mártir,
ni allane silencios, ni flagele mis sueños.
Me culpaste de tus pecados y cargue tus penitencias,
si mentí, que el cielo perdone lo ateo de mi ser y mi amor por ti…

Hablo creyéndote mío,
y tú cavabas el pozo donde me jacto de ser tu dueña,
pero tú forjas otra cama, otra boca, otra piel y otra mujer,
y yo prefiero ser miope a enamorarme de ti.

Qué, si lo trémulo de la noche fue mi culpa,
Qué, si fue tú carne quien enturbio mi aroma,
Qué, si te llevaste mi alma y mi sexo en el olfato.

Que corruptas fueron las horas que nos guardo el silencio…

Mi amor era una ostra para ti,
fui tu lastima o tu mi coincidencia,
el amor fue una cruz para santificarme,
y tu seguridad se construyo las costillas de la mía.

Viviré de recuerdos y beberé tus oscuridades,
recordaré tus ojos en la sombra,
seré de ti, de tus frases, tus manos, y mi jadeo,
probare tus labios pensándote mío y seré lo que no fui.

Quedará el remanso de tu dedo que dibujo mi piel.
serás la carne de mi carne y morirá conmigo;
y serás mi amante aunque la vida sea mentira.
Porque para ser tú pecado necesite el nombre de tu penitencia…

Elva*

jueves, julio 13, 2006

Sin Poder Dormir...


Foto: Elva Garcia

Tengo la vida perdida en el combate de mi muerte
y pocas cosas por hacer;
quiero levantar las murallas de mi alma derrumbada,
y cernir sobre mi cuerpo los remansos de mis vuelos…

No queda más sed de beber de mi memoria,
concentrar el sabor del pasado en mis labios,
pintar versos de azul y rojo
y así vestir de colores las palabras
para dedicarme a cultivar en flor mis argumentos…

Rece los mil y un días a mis noches,
y el limonero lloraba sus azahares
y el espacio se rodeó de un velo blanco,
y yo aguardaba en mi agrio seno su dulzura…

La mirada se volvió el clavo donde colgué mis ojos…

Mi voz se convirtió en la sombra de mi oído…

Siempre pregunte las mismas cosas:

¿Y si no soy dueña ni de mi rostro?

Sin bautizo creí ser dueña de mi nombre.
y me equivocaba como siempre y como nunca,
vivía de la ironía de mi reflejo y chapoteaba entre dudas mis dedos...

Nunca necesite nada y perdí todo,
me quede con el pensamiento semidesnudo hasta las costillas,
me quede con eras en los bolsillos y sin tiempo en los relojes,
me convertí en deidad para olvidarme de mis furias.

Nunca supe de filosofías ni verdades fugaces,
ni cangrejos idealistas,
ni caminos sin esquinas, ni estepas inundadas, ni hedonistas pecadores,
siempre supe algo todo y si no sabia lo inventaba,
vivir era una pesadilla y vivía la pena dormir despierta…

Elva*

jueves, junio 29, 2006

Tejiendo Olvidos...

(foto: Elva García)

Como Sabinista yo también espero curarme de ti…

Si hablo de amor,
talare soledades en tu dolor callado;
y enramada de uno a otro trepare a tus ramas,
hablare de ti con todos sin nombrarte
y guardare la savia de tu recuerdo que preño mi vientre…

De tu alma fui el titiritero,
recorte otros rostros para hilvanar tu cara
junte los pedazos de mis fracasos para formarte,
te di un ojo café y otro de gato para mirar las noches,
te vestí de papel y letras para hacerte parte de mis cuentos
y te di la cualidad de amante y no de esposo, ni de amigo…

Tus labios eran los más gruesos
o tus mordidas las oscuras,
tus dedos saltamontes en el verdor de mi piel;
tu silencio dibujaba claroscuros en mi cuerpo,
te amarrabas a la voz de él y el apellido de otro,
y yo te invente para amar a alguien…

Perennemente fui tuya,
tuya y de todos sin ser más que de ti.
Quizás nunca supe lo que era,
y seguí perteneciéndote según la costumbre…

Hoy me permito destrozar tu recuerdo,
no hablare de ti;
alquimizaré este sentimiento fermentado,
inventare otras enfermedades,
tú no serás el remedio con limón y miel;
me ahogare en otros fuegos
y olvidare la lluvia de tus manos…

Perecemos soterrados en un mismo tiempo,
seré desterrada y desuncida de ti,
de ti que todo lo tengo,
el vino y lo volátil de tu amor
para vivir embriagada de fuego y sed…

No eras perfecto,
eras tormenta al hablar,
y tus defectos enramados los plante en mi cama;
fuiste el tabaco y la comida,
fuimos uno en nieve para almacenar el invierno en el alma,
pero hoy voy pico y pala a enterrar las palabras que vinieron a nombrarte…

Elva*

viernes, junio 16, 2006

Para amar...


Recuerdo desabrochar tus pasiones de mi espalda,
te amaba por mera coincidencia artificial,
te deseaba en estribillos y dibujaba besos en tu piel,
eras mío en una invasión de dientes y mordidas en tu carne.
Que rastrero es amarte empapando la alcoba de sombras.

Recuerdo el influjo que vació tu boca a mi aliento;
tu amor era un prefiguración de ti mismo,
un eco encadenado a mi nombre,
una resonancia que abarcaba el semblante de mis soledades.
Era tal vez el amor una murmuración de anonimatos,
o aquellos espejismos que enturbian el reflejo de mi propio ser.

Pero mi amor iba en crescendo y olvidándose del pianno,
y yo bebía de ti la corrupción de mi alma;
comía de ti aquel deleite que erizaba mi monte de Venus,
porque sólo el silencio encendía señales de pernicía.

Sórdida y serena me hundía en tu cuerpo más y más
y las caricias ululaban insaciables por todas partes.
Los pecados desfilaban uno a uno frente a mí,
y yo te miraba en cada uno de ellos multiplicando tu nombre;
los vestía de ausencias y los cortejaba con olvidos,
era de todos sin ser de nadie,
era tuya sin ser de todos,
era solamente del amor y nada más de quien quería acordarme…

Elva*

martes, mayo 23, 2006

Para olvidar...


Moriré,
porque sólo hay que morir,
porque el cuerpo se acostumbra a desangrar los versos
y uno deja volar la vida en cada sílaba…
Moriré en el luto del negro como la media noche
perenne hay que morir oscura y sin testigos…

Pintare en mi espejo los semblantes del dolor
Odiare como sólo el rencor puede dictar
Caeré muerta en los brazos de mi propio pensamiento.
y aplastare mi multicolor sonrisa cuando la luz se extinga…

Esbozare en el filo de la navaja los rostros de mi olvido,
Extraeré cada gota de tu recuerdo de mi sangre
así cortare los hilos de tu nombre de cada idea…

Después de morir no regresare donde mis padres
Me olvidare de ti y de mi como un suspiro del aliento,
Y romperé el reflejo vagabundo de nuestras noches,
Nuestro sueño king sice y nuestro avión de seda.

Seré la pausa que dejo el silencio en prenda
Viviré soñando que secaba mis pensamientos en flor al alba,
me encerraré cada día en mi capullo para deshojar el tiempo,
para derramar los días donde no fui yo para volar…

Amargamente ahogare mis labios en alcohol.
Beberé y beberé hasta que de ideologías florezcan yagas,
Y tal vez uno que otro de mis verbos ira mi funeral…

Elva*

viernes, mayo 12, 2006

Hablando de ti y de mi...


Y si te digo quién soy, pensarás que te he mentido,
que nunca fui lo que tu horóscopo decía.
Y si te digo que me marcho,
pensarás que me olvide de mi oficio de ser tu silla y beberme tu café.
Te diré que te dejo porque no te amo. Entonces mentiré
desde el nudo de mi garganta
a la punta de tu lengua…

Quizá nos podemos inútilmente perdonar, y nos embriaguemos
nuevamente el uno en el otro,
Entre besos,
besos y saliva, tequila ,
tequila y olvido, olvido
y limón. Mientras el verde
de la costumbre atará las cintas a los zapatos.

Después volveremos a engañarnos, seremos parte de otros platos y otras mesas,
tendremos un sabor diferente y un aroma que no nos corresponde,
pero nos diremos te amo y esperare de ti lo que ni de mi esperaría…

Te pediré que comas de mí, que bebas de mí, que seas yo,
que hagas de mi amor lo que te plazca, y estarás con otra
aunque no estés conmigo, y yo aunque sea de otro,
sin haber sido tuya le pondré a mis gemidos tu nombre...

Y nos odiaremos con el amor más puro que jamás vivimos…

Tormentosos, sólo como tu y yo podríamos serlo,
si haber sido nunca el uno del otro, sin ser,
ni la calle, ni la esquina ,
ni el paraguas,
sin llover por dentro y sin un rastro de destino.

Será que nos ahogamos el uno en el otro,
O nunca cerré el grifo por donde se filtro tu esencia en mi cuerpo.

Te pido que destroces lo que subsiste de mi amor,
mis labios de aire, mis senos terracota y mi sueño súper sport,
que eleves de una vez por todas mis anclas,
donde tantas veces me serví de ti como mi freno y mi timón.
Sólo quiero dejar de amarte y zarpar de tu cuerpo…

¿Me entenderás?
Siempre lo dude…

La vida es un vaso de agua al cual nunca supe si dejar lleno o muy vació,
Pero siempre bebí contigo,
siempre de un golpe y hasta el fondo de tu ser hasta embriagarme en tu aliento,
hasta ahogarme en el ir y venir de ti para conmigo.
amándote como solo los tontos amarían…
Aunque de copa en copa,
la distancia
sólo fue el cristal que reflejo de tu olvido…


Elva*

martes, mayo 02, 2006

De recuerdos y otras cosas...


Recuerdo cuando te marchaste,
el silencio se abrazo a mi cuerpo,
un gemido se convirtió en mi lengua y yo calle,
entonces mi alrededor se vistió de luto…

Mire a las estrellas cortando los hilos que las unían al cielo,
las mire cayendo al vació de lo terrenal,
las mire como se estrellaban
las mire como se destripaban como perros sobre el asfalto…

Te extrañaba en cada poro y en cada ausencia de ti a mi lado.
Todo era más negro y más pequeño que de costumbre,
incluso mis pasos que dejaban huellas encendidas se fueron apagando.
y me hacia más chiquita y el mundo me apretaba…

Recuerdo el bar de aquella esquina,
sus mesas y sus sillas siempre derechas y atentas a mis penas.
Recuerdo a las copas que como soldados una tras otra iban siempre formadas a mi mano
al comandante Tequila con el cuello alto y sin cabeza…

Y yo,
yo solo me bebía el néctar de tu ausencia y lo fermentado de mi alma.
Y yo,
yo iba acompañada de la chingada que al final se fue con otro…

Cuántos recuerdos tengo de aquella noche…

Recuerdo el ferrocarril y sus vagones de cuarta;
aquel gigantesco ciempiés de acero que trago tu rostro y nombre.
Tu apellido lo alcance a guardar en los hijos que nunca tuve,
pero nunca fui capaz de decirle desgraciado a ninguno de ellos…

A pesar de todo sonreía,
estaba ebri-borracha de amor,
(Él mejor sinónimo del estupidismo)
pero aun así te amaba con las fuerzas infinitas de olvidarte…

La vida seguía porque nunca quiso esperar en el camino a nadie,
Los grillos no dejaban de cantar y las cortinas del cielo permanecieron cerradas,
El Sol se pudría detrás de ellas y la luna dejo un hueco en el cielo para escapar,
Así que no hubo más de beber, ni más lluvia acida, ni más ranas ni más amores…

La vida se convirtió en una X grandota,
de esas que si las levantas se convierten en tu cruz,
de esas que son la segunda llamada de la muerte antes de que la clave en algún sitio.
Y que le queda a uno,
solo le quedad seguir suspirando por lo que no llega,
matando con suspiros a los chinos del otro lado del mundo…


Total, siempre me pierdo en el camino largo;
yo hablaba de ti y no del mundo,
ni de asfalto,
ni de soledades,
Ni de todas esas cosas de las que siempre hablamos todos…

Al final me quedo de saldo la resaca.
De la crucifixión de tu recuerdo una que otra astilla;
todo sigue igual…
La oscuridad no tuvo otra más que seguir siendo oscura,
al olvido no le quedo más que olvidar,
Y a mi no me quedo más que encerrarme nuevamente en mi capullo king sice.
(por eso de la claustrofobia)

Y a ti, a ti que como papalote el viento te lleve…
Total los locos tenemos la condición de cebolla,
estamos siempre enterrados bajo la tierra en el mismo sitio…


Elva*

martes, abril 25, 2006

SIGO DE CUMPLEAÑOS

Pues la cosa es que esta niña anda de cumpleaños desde ayer, y pues la verdad que ni tiempo he tenido de escribir. Espero que mas vieja no se me traben los engranes y se me vaya la inspiración. Pero después de 12 dias de vacaciones y este cumpleaños, ya sólo me queda volver a trabajar y a escribir, y a estudiar y a crear lo que se pueda, total el limite no es ni el tiemo, ni la edad, ni el espacio, ni la vida ni la muerte, así que no hay pretexto para no "ser".
Que mis 23 añitos hablen por mi proximamente...
Saludos a todos y gracias por los comentarios, prometo muy pronto el siguiente post.
Elva*

miércoles, abril 05, 2006

Recordarte


Recuerdo como exprimiste besos de tu boca
y yo estaba sentada a la orilla de tu labio,
esperando a que subiera la marea,
pero nunca vi una estrella fugas escapando de tu aliento,
sólo contemple las sombras dormidas entre tus dientes.

Recuerdo tus piernas con su rumor de aves,
a la viajera distancia de tus huellas;
trate de escalar por cada uno de tus poros,
pero nunca pude echar raíces en ningún desierto,
sólo atrape lagartijas y me guarde el verde de su piel en los bolsillos,
uno nunca sabe cuando falta vida a esta muerte…

Me entretejí en lo zigzagueante de tus bellos
donde tu piel es secreto de la espuma;
fui al pozo de tu ombligo,
pero no había ranas que chapotearan en tu cuerpo,
ni el murmullo de los grillos,
ni el aliento volátil de las libélulas,
ni siquiera un sabor a menta de los sueños,
o el color del arcoiris dibujando en las arrugas…

Aún había un rumor de reseca en mis entrañas;
no hubo vino que vistiera a las ausencias.
Nunca fuiste igual aunque siempre hablamos de las mismas cosas,
y los idiomas siempre fueron nuestras lenguas anudadas al silencio…

Elva*

martes, marzo 21, 2006

La muerte antes de nacer...


Me he de consumir en el inicio de mi propio origen,
en el frió del flujo de tu útero
en lo podrido de tu vagina y en lo verde de tu amor,
He de golpearte el vientre desde adentro para que me excretes de tu ser,
para morir contigo antes de que me mates viviendo.

Quién dice que tu cuerpo es un alo de tibiedad o el rumor de un beso;
vivo de tu sangre y los desperdicios de tu boca,
nacer en este nido es nacer con un sabor a veneno
entre ecos negros y ondas de oscuridad,
lo más cerca de la felicidad suena en las olas del mar de tus orines,
quizá de aquí nazca mi claustrofobia y aflore mi odio hacia ti…

Porque no tener el derecho un síndrome post nacimiento;
temo que seas mi asesina y el verdugo de mis actos,
el juez de mis errores y el hierro que quiebre mis primeros dientes.
Será mejor la inyección letal antes que de judas este beso.
Hay madres que crecen cebollas con las piernas al dominio público y la razón enterrada…

Quién me cambia mi nacimiento por un ramillete de estrellas,
Quién me cambia la vida por los versos que escribiré,
Quien me cambia la muerte por mi muerte…

Qué ella se quede con sus trajes amarillos de amargura,
Que se quede con sus zapatillos de concreto,
Con sus muñecas de porcelana que han de juzgar mi fealdad,
que me dejen en la deformidad de mi mundo o en el esperma de mi padre.

Me juro a las cuatro esquinas de tu ser,
que al mirar el primer rose del sol escapare de ti,
que tragaré tus pezones donde diste de mamar vida a tantos hombres…
Morirás un día bajo el cobijo de la misma soledad que me regalaste como mi primer juguete.
He de negarte setenta veces siete antes del perdón,
y despertaras con tu alma muerta entre las pinzas que me sacaron de ti,
total de tu muerte nadie culpara a los muertos antes de nacer…


Elva*

martes, febrero 28, 2006

MORIBUNDA


Podrida el alma,
me vomitare millones de veces sin encontrar la salida de mi ser,
me perderé en esta podredumbre que fermenta odios,
que alimenta peces muertos entre mis piernas…

¿Qué sanguijuela ha de cortar mi clítoris para sangrarme y beber de mí?
He dejando de ser mujer para guardarme en el obligo a mis muertos
para acortar el camino umbilical a la placenta de mis padres,
para fermentarme en el semen que un día eyaculo mi boca…

El negro pica con su aguijón y el dolor se chorrea en mi cuerpo,
se distribuye entre nervios como sombra,
se abren ramificaciones en la sangre,
se aglutinan las células y explotan las neuronas,
voy pudriéndome entre las emanaciones que exhala mi sexo como espuma.

Qué otro destino tengo si no es la fosa séptica de mi escusado
Qué purulentos son mis sueños en los fetos que arroje por los desagües
Qué pútrida es mi alma y que hueca es la luz…

He de tragarme los testículos de aquellos que como uvas fermentaron mi vientre
que pregonaron mi amor como el sagrado oficio de una puta…

Se me antojan muertos,
todos muertos en mi lugar,
matarlos y excretarlos de mi ser,
como el día en que rasgaron mi himen como un sudario,
como el día en que descubrí a la muerte y muerta me fui con ella para olvidar…

Elva*

miércoles, febrero 15, 2006

Los primitivos


Lo primitivo viene de lo casto del nombre,
a lo místico del alma…
Hemos de temer a Dios sobre todas las cosas
y olvidar el concepto del “ser”.
en esta fe carcomedora de entrañas, capadora de ideas…

Hubo un tiempo en que sabia todas las cosas,
la naturaleza primitiva buscaba de la “verdad”,
perecedera ciencia de verbos en cualquier carne,
que bajaban el cielo hasta mis dedos en las palabras,
para beber dioses de agua bendita,
sangre de mi sangre encarnada en el nombre…

Llegare a negarme siete veces,
hasta engullirme en lo insondable de lo terrenal
hemisferio que delinea penitencias en interrogantes,
parasitismo, monasterio lascivo con la verdad en la redención…

Moriremos en esta enmienda de mí ser,
terminaré arrancándome la carne.
En flor de las manos dónde semilla sembré mi cuerpo
extirpare las raíces de este encarnado amor…

Cambiare mi nombre por silencio,
mi silencio por el olvido,
encerrare en mis labios los recuerdos.
Hoy termino con el inició de aquel final…

Sabios los ojos
que no pronunciaron palabra alguna en las pestañas,
que no chorrearon ninguna letra…

Frente sabía,
que dejo en mis sienes vació de pensamiento,
cuna de aire que llevo mis ideas al vació…

Lengua sin camino ni saliva,
que tradujo en tu nombre todos los idiomas
para no pronunciar nunca tu recuerdo…


Elva*

martes, febrero 07, 2006

BLOQUEO

Estoy totalmente bloqueada, así que no se si respirar, o escribir tonterias, la verdad es que si alguien sabe como se sale de agujero, espero me rescate.
Volvere...

Elva*

viernes, enero 20, 2006

EL DESEO DE VIVIR LA MUERTE (primera parte)



Quienes creen que no tenemos conciencia a esta edad, puedo confirmar que en mi primer día, estoy tan concentrado en ELLA, que soy capaz de hablar y escribir en sus manos, sin que ella note mi presencia. Lo hago a través de ondas cerebrales, nervios, cosas por el estilo que no comprendo muy bien, pero hay cosas que no comprendemos y aún así existen. ELLA desconoce mi estancia en este sitio, sin embargo, ya come y bebe por mí.

La he visto triste en los últimos días, un poco desgastada, no se mucho de esas cosas, ni nada de ELLA antes de este día. Comparto con ELLA su tristeza, pienso egoístamente que ELLA se olvidara de darme nombre, un nombre que será de otro y cuando yo crezca será mío, y ELLA ha de nombrarme siempre con el. Viviré feliz, sueño con ELLA aferrada a mi cuerpo, sonriendo y tranquila.

Si me viera una sola vez lo entendería, quiero que sepa de mi, me aferro a su ido y trato de gritarle lo que pienso, de decirle que sólo yo le hago falta para que sea feliz, pero ELLA duerme y no me escucha.

Hoy recorrí errante su cuerpo toda la noche hasta perderme; hoy supe que es mentira creer que el lugar más tibio es el cuerpo de otro, en especial cuando se tiene tan azul el alma.

ELLA es triste, serena pero triste, trato de culparme por su tristeza, pero no puedo, ELLA no me conoce, ELLA no me nombra, ELLA no me ve ni me siente; es probable que mi cuerpo sea quien seque sus lagrimas algún día, quien la espere, quien la abrace; ELLA dejará de sufrir y también por ELLA.

ELLA despierta tan linda como cada día, se abraza a la almohada, mira hacia el techo, se pierde en los recuerdos que no consigo descifrar y se levanta.

Que triste es llover mar adentro y no tener un rió dónde perderse, se dicen las lagrimas que ahoga en su ser; las otras flotan en el aire estrellándose contra su cara y su cuerpo, pero ella las seca en sus manos, siempre tan tierna como la primera vez.

Va hacia el baño, se mira al espejo, se seca nuevamente las lágrimas, los ojos están cada día más hinchados y ELLA sufre cada día más hondo; ELLA nunca se da por vencida; se maquilla las ojeras de siempre, se arregla el cabello y sale a caminar, esperando encontrar un mejor sitio.

El camino se crea en sus pies, las cosas sólo existen ante sus ojos, ELLA es la creadora de su propio mundo; ELLA y las creaciones más maravillosas que ira almacenando en el archivero del tiempo, que habrá de nombrar junto aquellas cosas que querrá olvidar, que creerá haber olvidado; el camino sigue y las hojas caídas la acompañan en sus paso, mientras ELLA camina sin rumbo fijo.

jueves, enero 05, 2006

Confesión de amor...



La mujer florece en el gusano,
carga la cruz de un ángel muerto en unas pinzas.
Se concibe sin fe en la semilla,
como la túnica de un pleamar que dibujará gélida la noche…

¿Quién eres? (pregunto el padre)

Soy sólo el silencio (y el silencio vistió sus oídos)

Lo encarnado de sus fauces se abre,
se devora a si la lengua para no confesar,
entre saliva de mielsangre se declara la lujuria
colonizadora de la gloria en la melcocha de sus frases,
demonio, escupitajo de un sueño…

La tierra vomita a ese muerto (dice el padre)

Los escarabajos adhieren los huesos de la mujer,
el hedor se hilvana en las venas,
una larva moldea lo purulento y le da el nombre del “ser”.
Su voz revienta el oído,
el sonido se derrama sobre la cerilla,
se escapa la musa, la muerta en su hijo,
la muerta en el semen que pintaba su boca,
la santa glorificada en las flemas de Dios.

He mirado gangrenarse tu nombre (decía)
He desterrado tantas veces tus sueños (gritaba)
Cuánta heroína como babosa dejaste en tu camino,
cuántas veces arrastraste tus pasos ante mí…

(La mujer viste el negro odio de su suerte y murmura).
Te consagro al averno
al rincón tibio que dejo la puta.
Te dejo infiltrado en la eyaculación de mi muerte,
y mis recuerdos olvidaran tu nombre…

Que odio tan tibio dejo la daga cuando rasgue mi carne,
que frió quedo mi niño con la cabeza en la punta de aquel filo,
que coagulado destino vive en los dietes de la muerte,
que puta mala suerte tengo de seguir con vida…

Tu que eras la llave de mi vagina,
el dueño del sueño abortivo de esta infecunda tierra,
el pastor de mi útero de salitre,
el vigía de mis ovarios dormidos en la concepción.

¿Qué queda?

Sólo parir los fetos de mis recuerdos,
amamantar los gusanos en el pezón de mi decadencia,
morir, morir por aquel podrido engendro que ensalzo tu verga.

Olvidarme de tu cuerpo que era mi sudario…

¿Qué queda?

Nada, sino soñar con los odios concentrados en los puños,
romper el deseo de tu purulento amor en su leproso tacto.
Que judas fueron tus labios sin carne,
que irónico era amarte con tanta fe…

Siervo decapitado sin una cruz,
fortuna con la suerte apagada de adentro,
dueño del mar de menstruación que termino con mi niñez,
el lodo que convirtió mi piel en arena.
Que tan pisado quedo mi cuerpo con tus huellas de camino,
Cuántos no hicieron pasos para marcar mi vientre…

(Recuenta su vida)

He de morir con tu recuerdo y tú conmigo.
He de encontrar el fin del camino en la claudicación de mis alas.
He de recobrar el retorno de mi horizonte…

He perdido el deseo:
de descarnar a tus sueños,
de tragarme tu lengua,
de anudar tus tripas,
de matarte,
de encontrar el odio al beber tu sangre…

Me he de olvidar de ti en mis recuerdos,
en el vientre que de un golpe que mato el mío…

He de morir contigo mi niño,
angelito sin alas,
aborto de mi salvación…

Elva*