lunes, diciembre 28, 2009

Acto Primero...

entierros


El último suspiro estalla en mi cuerpo,

estoy sin fortuna y sin herederos a caja de sueños y coronas de espinas,

no tengo hermanos, ni verdugos, ni velas que den por mí una plegaria...


Sin muertos que recordar los fantasmas son reflejos aferrándose a la mirada,

siento un terremoto en los dedos derribando a las atalayas de mi niñez

sosteniendo en una ostia a este mundo de azúcar ácida...


Si pudiera recortar las huellas de mi pies y multiplicar mis pasos,

Si pudiera roer mi lengua y tragar todas mis blasfemias,

Si pudiera con los excesos y mis vicios derribarían ángeles sobre mi tumba.


Grito y la vida se resbala por mi garganta,

abro el telón de mi vida en esta obra celestial del infierno,

el viento recorre como cuervo las butacas,

las ventanas chorrean luz en esta oscuridad que empapa

sostengo el silencio, cruzo los dedos e interpreto mi muerte...


Elva*